VALENCIA 2-3 MADRID

Cualquier equipo no gana en Mestalla, escenario de una batalla disparatada que se llevó el Real Madrid por tozudez. Los de Pellegrini

necesitaron adelantarse hasta tres veces para ser los vencedores de un combate que se empeñaron en ganar. El Valencia respondió dos veces, pero a la tercera se quedó sin respuesta.

Garay, protagonista inesperado, cabeceó a las redes una falta botada por Xabi Alonso. El argentino, que apareció en escena por la lesión de Pepe, dio el último grito del Madrid en Mestalla. Fue el grito definitivo en un partido de locos.

El Real Madrid salió convencido de territorio enemigo. El Valencia se quedó sin respuesta
El Real Madrid salió convencido de territorio enemigo. El equipo de Pellegrini no sólo ganó un partido de fútbol, ganó confianza en sí mismo. No estaba Cristiano, luz madridista en las buenas y en las malas, pero al Madrid no le importó. Los blancos superaron todos los problemas.

El libro de ruta valencianista se lo saltó el Madrid. Los de Emery acabaron superados por la cabezonería visitante. El Valencia se ordenó con cabeza e insistió por la derecha con Pablo. Pepe y Albiol se agigantaron en la retaguardia para mantener a su equipo con la cabeza alta. El valenciano no regaló nada a los que fueron sus compañeros. Raúl se olvidó de su pasado en 90 minutos para firmar un partido impecable.

El Madrid descubre a Benzema La firmeza defensiva hizo progresar al Madrid, que fue otro con el balón y con Benzema. El francés se descubrió en Mestalla. Todavía estaban esperando a Karim en la 'Casa Blanca', cuando Benzema se presentó en la capital del Turia. Al francés le vino bien tener enfrente a Villa, valencianista que tenía reservado un sitio en el nuevo Madrid antes que el ex del Lyon. Benzema fue otro. Entrando por la izquierda, se convirtió en una pesadilla para el Valencia.

Higuaín, futbolista que lleva la victoria en el pecho como el escudo que defiende, conectó con Benzema y el Madrid fue diferente. El 'Pipita' rozó el gol en dos ocasiones antes del descanso, la primera vez no vio portería, la segunda César sacó el disparo con serios problemas. El balón se fue a córner, y el Madrid recibió dos malas noticias en un minuto. Ramos mandó el balón al palo, pero peor fue lo de Pepe. El portugués se lesionó en un mal apoyo en un salto. Tiene afectados los ligamentos. Malas noticias para el Real Madrid.

Tozudez blancaEn el peor momento nació la victoria del Madrid. Por Pepe entró Garay, héroe de la batalla. Tras el descanso, Benzema no avisó, rompió a Bruno y sirvió al corazón del área, por donde no apareció nadie del Valencia y sí Higuaín, madridista de raza. Los blancos se adelantaron y tropezaron dos veces con la misma piedra. Seis minutos le duró la alegría al equipo de Pellegrini, igual que en Marsella. Mathieu centró, Casillas salió a por uvas y Villa hizo lo de siempre. Fue el 1-1. El 'Guaje' sólo apareció para celebrar el empate, que no es poco.

El carácter del Real Madrid lo representa a la perfección Gonzalo Higuaín, argentino que debe haber estudiado la historia madridista. El 'Pipita' también hizo el segundo. A Higuaín le dejaron pensar dentro del área y el Valencia lo pagó. A diez del final, empató Joaquín, que soltó un latigazo dentro del área ante el que pudo hacer mucho más Casillas. El encuentro agonizaba, pero al Madrid le dio tiempo para llevarse el partido. Marcó Garay y los de Pellegrini sumaron tres puntos autoritarios.