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viernes, 22 de enero de 2010

VALENCIA 4-1 VILLARREAL


El Valencia avisó al resto de sus intenciones. Los de Emery se reafirmaron en el campeonato contra el Villarreal después de una eliminación copera que dejó secuelas y dudas en el ambiente. El Valencia se encargó de fulminarlas jugando al fútbol y arrollando a un Villarreal que no respondió en Mestalla. Villa y Silva estuvieron por encima del resto y al equipo de Valverde sólo le quedó rezar. Sus plegarias se las cargaron dos futbolistas superiores y diferentes.

Villa y Silva estuvieron prodigiosos. El '7' marcó la mitad de los goles y el canario dio dos, marcó uno y destapó el tarro de las esencias

Todo es más fácil con Villa y Silva. El Valencia contaba con ventaja. En su equipo contaban con una luz en campo contrario, brillo que salía de las botas de Silva. El canario estuvo superlativo. Dio dos goles, marcó uno y guió el fútbol del Valencia, que es otro con el de Arguineguín en el campo. Villa respondió, no es noticia. El '7' del Valencia y de España siempre fue una amenaza, ratificada con sus dos goles y su hambre por superarse. Mestalla puede dar gracias al cielo.

El Valencia fue el dueño y señor de un encuentro en el que no compareció el Villarreal, que prolongó su resaca copera en la capital del Turia. El control fue valencianista, sin discusión, y de eso también se encargó Ever Banega, recuperado para la causa, como Joaquín, por obra y gracia de Emery. La pausa del argentino la necesita un equipo que se adelantó en el 6' gracias al ex de Boca, que hasta se aplica en tareas defensivas y se deja ver por sorpresa en las inmediaciones enemigas. Él abrió el marcador.

Silva recibió dentro del área y cedió a la frontal, donde apareció Banega, que no estaba solo. El centrocampista contaba con un latigo que dejó huella en Diego López. Su derechazo fue inapelable. El Valencia no lo dudó un instante y se fue a por el cuello del Villarreal. La herida no fue mayor por Diego López, pero mantener el candado intacto era imposible en Mestalla.

COPA DEPOR 2-2 VALENCIA


Deportivo y Valencia honraron a la Copa del Rey con un partidazo, con veinte minutos finales vibrantes, de área a área, en el que los de Lotina se ganaron su pase a los cuartos de final. Bien pudo hacerlo el Valencia, que se puso 0-2 y llegó con esa ventaja al descanso, pero fue víctima de su relajación y del poderío de Filipe Luis, que levantó al Deportivo con una actuación portentosa. Con el partido igualado, el Deportivo pudo hacer el 3-2 varias veces. En los últimos cinco minutos, quien estuvo cerca del tercero fue el Valencia, pero Silva y Mathieu no acertaron en boca de gol.

La entrada de Zigic y el Chori Domínguez en el equipo inicial le salió bien a Emer.
El partido dio tantas vueltas que dio tiempo para tener mil sensaciones. En el primer tiempo, el Valencia se sintió muy cómodo, y eso que Emery no sacó a Villa ni Joaquín. En su lugar entraron Zigic y el Chori Domínguez, que estuvieron a un fantástico nivel el primero y bastante bien el segundo. El Valencia comenzó dominador, con Silva y Domínguez juntándose bien entre líneas y haciendo daño. El Deportivo acusaba las bajas y el temor a perder su ventaja. El buen arranque valencianista tuvo sus frutos cuando a los diez minutos Zigic cabeceó un centro desde la derecha de Miguel, que había recibido del Chori. El balón se le escurrió en las manos a Manu, que quiso atraparlo.

Con la mitad del trabajo hecho, el Valencia se tranquilizó. Ya sólo le hacía falta un gol y había un mundo por delante para conseguirlo frente a un rival nervioso, que no encontraba la fórmula. Algunos centros desde las alas de Filipe Luis y Juan Rodríguez que provocaban córners, pero nada más. El brasileño jugó como interior en lugar de como lateral y creó todo tipo de problemas. En ocasiones jugó muy por dentro, casi de mediapunta, y no supieron detectarle. Antes de que todo eso ocurriera, Zigic hizo el segundo, tras otro centro de Miguel, esta vez a pierna cambiada. En el segundo palo, el serbio cabeceó de forma impecable, con mucha fuerza.

Parecía la puntilla para un Deportivo deprimido, que no había inquietado a Moyá más que un tiro lejano de Antonio Tomás. Nadie contaba con la explosión de Filipe Luis, que a los cuatro minutos del segundo acto se encontró con un balón en la frontal, le hizo un nudo a Marchena y batió con la puntera a Moyá. Poco después, el propio lateral (o interior) brasileño volvió a irse como quiso de Marchena dentro del área y falló ante Moyá. En cinco minutos, Filipe Luis había agitado a todos, a los dos equipos y a la hinchada, y había cambiado el partido.

Los últimos veinte minutos fueron los mejores del partido, con los dos equipos rozando el gol.
El partido iba en ese momento a la prórroga, pero quedaba demasiado como para pensar en eso. El Valencia se asustó y vio por primera vez en muchos minutos que podía ser eliminado. En un rato de desconcierto, Luis Filipe se encontró con un balón en la línea de fondo, se fue hacia la portería de Moyá y su centro lo metió Juan Rodríguez con el estómago. El Deportivo había levantado el partido.

El rato que restaba para el final, veinte minutos más la prolongación, fue lo mejor del choque. El Valencia buscando el tanto que necesitaba y el Deportivo batallando y contraatacando como lo que es, un equipo súper trabajado. Filipe Luis tuvo dos, una a puerta vacía y otra delante de Moyá, pero mantuvo con vida al Valencia. Emery metió a Banega y finalmente a Villa. No había más madera que quemar, porque antes había entrado Joaquín en lugar de Domínguez. La tuvo Silva en el área pequeña, pero no acertó a rematar. La última la mandó Mathieu fuera, dentro del área. Después de 94 minutos frenéticos, Riazor respiró.

XEREZ 1-3 VALENCIA


El Valencia confirmó que es la nueva alternativa a Barcelona y Real Madrid después de derrotar al Xerez (1-3). El conjunto de Unai Emery tuvo que sudarlo, especialmente en la primera mitad, para doblegar al colista, que hizo un dignísimo primer tiempo, pero que acabó cediendo terreno ante la calidad de los valencianistas.

Con el Sevilla en caída libre y con un colchón de cuatro puntos sobre su inmediato perseguidor, el Valencia se ha convertido en el nuevo líder de la 'otra' Liga, ésa de 18 puntos en la que no están ni el Barça ni el Madrid. Se ha consolidado en esa condición que hasta hace poco ostentaba el Sevilla y no está más cerca de los dos grandes porque ha fallado bastante en casa.

Lejos de Mestalla es donde está cimentando todo su trabajo. Por eso es el mejor visitante de la Liga BBVA y, por eso, era un sacrilegio fallar en el campo del colista. No lo hizo, pero tuvo que sudarlo. Sobre todo durante los primeros cuarenta y cinco minutos, en los que el Xerez plantó cara e, incluso, llegó a empatar la contienda. Pero es evidente que cuando uno sólo puede poner garra y a otro le sobra calidad, cuando pasan los minutos, se impone el segundo.

Eso fue lo que pasó en Chapín. El Valencia se adelantó en su primera llegada con un pase de mago de Banega por encima de la defensa que bajó muy bien Mata para abrir el marcador. El Xerez no se arrugó y comenzó a llegar al área de César. Primero perdonó Francis y luego Alexis sacó un balón comprometido para, a la tercera, conseguir el empate. Una contra de manual, perfecta por su rapidez y ejecución, ayudada por un resbalón de Joaquín, propició el tanto de Carlos Calvo.

Quince minutos tardó el Xerez en empatar y ocho dejar de estarlo. La calidad del conjunto 'ché' se impuso en una acción de Villa, que sirvió el 'pase de la muerte' a Silva. La vuelta del grancanario, que hizo su segundo gol en dos partidos, ha permitido al Valencia tener más pegada arriba. A ello se ha unido el resurgir de Joaquín, que lleva unos partidos a un nivel alto y que en Chapín fue el mejor del partido. El del Puerto de Santa María recordó a su mejor versión, encarando y yéndose casi siempre de sus oponentes.

COPA VALENCIA 1-2 DEPOR


El Deportivo de La Coruña encarriló la eliminatoria tras imponerse en Mestalla al Valencia gracias a los tantos de Guardado y de Pablo Álvarez en un partido que tuvo todo lo que pide un aficionado al público: goles, emoción, ocasiones, polémica e intensidad.

Como si de un combate de boxeo se tratara, Valencia y Deportivo intercambiaron golpes en los primeros minutos. Ambos conjuntos llegaron a la meta rival con claridad y los dos salieron buscando la victoria que les ayudara a encarrilar la eliminatoria.

Cuando todavía no se habían sentado los aficionados en Mestalla llegó la primera jugada polémica que podría haber cambiado el signo del partido. Maduro se encontró un balón dentro del área y su disparo lo tocó Marchena ante Manu para mandarlo al fondo de las mallas. El línea de Velasco Carballo vio fuera de juego en la posición del sevillano y anuló un tanto que debería haber subido al marcador debido a que la situación de internacional español estaba en línea con la defensa gallega.

Riki tuvo que abandonar el terreno de juego lesionado a los 20 minutos de la primera mitad.
El Valencia salió muy fuerte, no quería esperar para estrenar el marcador y Joaquín, Villa, Zigic y Mata dieron sensación de peligro hasta que el Deportivo se puso a jugar como él sabe. Por la derecha lo intentó con las llegadas de Laure y Juan Rodríguez y por la izquierda fue suficiente Guardado para poner en apuros a Miguel, quien no pudo con el mexicano.

Mientras el Deportivo lograba crear peligro en la portería de un Moyá muy dubitativo en las salidas pero seguro bajo los tres palos, llegó el golpe para los gallegos convertido en la lesión de Riki, que continúa su calvario con las lesiones.

El ritmo del juego era muy alto por parte de los dos equipos, en la medular la batalla de Juan Rodríguez y Sergio ante Marchena, Banega estuvo algo desaperido, era digna de análisis y en la defensa del Deportivo tenían que tirar de todas las artimañas posibles para frenar las llegadas de Villa y Zigic, quien lo intentó todo en su regreso a la titularidad.

Al partido sólo le faltaban los goles cuando se llegó al descanso y solamente dos minutos después de la reanudación Guardado solucionó el problema. Laure colgó el balón al área desde un saque de banda, Juan Rodríguez tocó de tacón en una situación acrobática para poner el balón en el corazón del área y Guardado se adelantó a su marcador para rematar junto a la línea de gol el balón al fondo de las mallas. La zaga local estuvo muy lenta y lo pagó muy caro.

El gol de Marchena debió subir al marcado.
Se le ponía muy de cara la eliminatoria a un Deportivo que no dejó de atacar y fue ambicioso a la hora de ganar el choque. Este trabajo le dio sus frutos a los de Lotina cuando se llevaban diez minutos de la segunda mitad. Zé Castro cortó un balón en defensa, se puso el disfraz de Beckenbauer y puso un balón en profundidad para que Pablo Álvarez, tras recortar a Dealbert superara a Moyá con un disparo desde dentro del área.

El público de Mestalla empezó a impacientarse ante la derrota de los suyos y a Emery no le quedó otra que dar paso a Silva, volvió tras una lesión, acompañado por Fernandes en lugar de Marchena y Zigic.
Con el canario en el campo, los chés comenzaron a controlar más el esférico, el Deportivo esperó en su campo para volver a matar a la contra y el Valencia se confundió en numerosas ocasiones al colgar balones desde la banda cuando el 'Gigantón' serbio ya no estaba en el terreno de juego.

Aún así, la presencia de Villa y Silva en el ataque se notaba y cuando quedaba poco menos de 20 minutos para el final el de Arguineguin dejó su detalle de calidad. Un ligero toque con el tacón fue suficiente para cambiar la dirección del esférico tras un disparo de Banega desde la frontal y confundir a Manu para recortar distancias y presionar a la defensa del Deportivo, que estuvo casi perfecta.

Hasta el final, los hombres de Emery siguieron intentándolo una y otra vez pero las jugadas de Mata, que fue sustituido por Vicente, Joaquín, Banega, Silva y Villa morían una y otra vez en las botas de la zaga visitante o en las manos de Manu. Además, el Deportivo supo jugar muy bien con el cronómetro debido a que Lotina realizó los cambios en los momentos justos y sus pupilos no se pusieron nerviosos en ningún momento.

Con todo esto y a falta de lo que ocurra en Riazor, lo cierto es que a los gallegos se les ponen las cosas muy favorables para medirse en la siguiente ronda al ganador de la eliminatoria entre Sevilla y Barcelona.

VALENCIA 1-0 ESPANYOL


Nicola Zigic volvió a ser decisivo para el Valencia. El serbio cuenta con pocos minutos, pero a cambio ya le ha dado seis puntos a su equipo esta temporada. Fue el artífice de la victoria en Santander y esta vez decidió en el minuto 92 un partido que parecía destinado al empate a cero. De esta forma, rompió una racha de dos encuentros consecutivos sin que el Valencia ganara y que le permite seguir en puestos de Liga de Campeones.

Lo cierto es que el conjunto 'ché' fue mejor a lo largo del partido y que mereció más el triunfo. Sin embrago, los tres puntos siempre estuvieron en el aire, puesto que el Espanyol dispuso de algunas buenas ocasiones para ganar. El equipo de Pochettino estuvo muy bien en defensa y cuando se despistaron ahí andaba Kameni, que amargó la noche a Villa.

El Guaje lo intentó por activa y por pasiva, pero no fue su día. En la primera mitad llevó casi todo el peligro, aunque la mejor de su equipo la tuvo Jordi Alba en un tiro cruzado. Más peligro llevó la de Javi Márquez a la media hora de juego y que sacó César. La sensación que dejaba el encuentro era que el Valencia dominaba, pero el Espanyol llegaba con algo más de peligro.

Tras el descanso Villa tuvo la primera de sus dos grandes ocasiones. Fue en un jugadón individual en el que se fue de dos defensores con caño incluido, pero Kameni le sacó el disparo por abajo. El inicio de la segunda parte fue arrollador por parte local, pero el meta camerunés estuvo muy seguro. De todas formas, Roncaglia pudo desnivelar la balanza con un tiro cruzado que se fue rozando el poste y que silenció Mestalla.

viernes, 1 de enero de 2010

PRIMER FICAHAJE DESPUES DE LA CAIDA DEL MURO DE BERLIN

Hristo Stoichkov desenfundó una pistola en el despacho donde el Valencia negociaba con directivos del CSKA el fichaje de Lubo Penev. "Si vais a vender a Lubo, yo también quiero salir ahora", vino a decir el delantero búlgaro. Tal anécdota la contaba Alberto Miguel, directivo del Valencia ya fallecido, a la vuelta de las negociaciones con el CSKA. Stoichkov tuvo que esperar un año hasta poder recalar en el Barcelona, entre otros motivos porque Penev tenía la ventaja de que quien decidía quien se marchaba un año y quien no, era su tío, por lo que le abrieron las puertas de par en par para que buscara e hiciera fortuna más allá del Muro de Berlín.
La historia de Stoichkov, en relación al fichaje de Penev, sintetiza lo peculiar que era sentarse a negociar por un futbolista del Este de Europa antes de la caída del Muro de Berlín. Nada que ver, por ejemplo, con el reciente fichaje del Chori Domínguez, para cuyo traspaso el Valencia ni tan siquiera ha tenido que trasladarse a Rusia para concretarlo. "Antaño no había internet ni daban los partidos por televisión como hoy en día", recuerda Salvador Gomar, gerente durante más de una década del Valencia.
Los ojeadores debían de aprovechar los partidos de las selecciones nacionales así como los amistosos de pretemporada. "De Penev teníamos informes de partidos con Bulgaria, aunque nos decidimos a incorporarlo tras verlo acción en un Trofeo Ciudad de Palma, en un partido que disputaron el CSKA y el Barcelona", apunta Juanjo Rodri, entonces secretario técnico del Valencia.
Hasta la llegada de Penev, el Valencia no había incorporado a ningún futbolista de la Europa del Este. Hubo un guardameta húngaro llamado Atchs que militó en el club durante una temporada, aunque corría el año 1934. tres décadas antes de que se construyera el Muro de Berlín. Penev, de esta forma, fue el primero y su fichaje, como bien recuerda Rodri, tiene historias como para escribir un libro. Las negociaciones con el CSKA las llevaron el directivo Alberto Miguel y el representante José María Minguella. La de Penev, además, recuerda Minguella, era la primera operación entre un club búlgaro y uno español en la que no intervenía directamente el gobierno comunista, las autoridades dejaron el asunto en manos de los directivos del CSKA, si bien, la mayoría de ellos eran altos cargos del ejército, por lo que tanto monta, monta tanto.
Las conversaciones comenzaban a primera hora de la mañana, y en la mesa nunca faltaba una botella de Vodka. Minguella ha confesado repetidas veces que en más de una ocasión se tuvo que tomar algún chupito en ayunas para no poner de mal humor a los anfitriones. Lo cierto es que ese tipo de negociaciones eran "peculiares", porque aunque "sabías que te iban a decir que sí porque ellos no veían personas sino dólares", comenta entre risas Rodri, "de un día para otro te ponían nuevas condiciones" o exigían incluir en los contratos cosas tan curiosas como las que hubo en el de Penev. En el libro de los 90 años de historia del Valencia se recoge lo siguiente: "En el contrato (de Penev) se especificó hasta mínimos detalles como el tamaño del ataúd y la calidad de la madera para el supuesto de que falleciera en España y tuviera que ser repatriado".
El Valencia pagó por Penev cien millones de pesetas, aunque veinte años después se puede decir que fueran ciento veinte. Rodri y Roberto Gil recuerdan que una de las cosas que más sorprendió a Alberto Miguel fue "la forma extraña que tenían los presentes por parte del CSKA en la reunión de repartirse el dinero". Sentados los búlgaros en una mesa circular, repartían parte del traspaso como si de una partida de cartas se tratase: uno para ti, dos para mí…
Y es que en aquella Europa del Este, poderoso caballero era Don Dinero. Porque aunque pudiera parecer lo contrario, "negociar con clubes del Este era relativamente sencillo, solo tenías que poner dinero encima de la mesa y te abrían todas las puertas", confiesa Roberto Gil. Como ejemplo, la anécdota de otro fichaje de un jugador del Este, Pedja Mijatovic. Mijatovic estaba sancionado para un partido por agredir a un contrario. La Federación yugoslava acabó pasando por alto la sanción en cuanto el Partizán le informó que un representante del Valencia, en concreto Pasieguito, había viajado hasta Belgrado para ver en directo a Mijatovic. El delantero montenegrino jugó el partido en cuestión y Pasieguito se le trajo para Mestalla.

TOCA GANAR

Después de las uvas y de los festejos para dar la bienvenida al nuevo año, la Liga BBVA regresa con toda su fuerza y con varios partidazos para el disfrute del espectador. Uno de ellos será el Valencia-Espanyol, un duelo en donde los dos equipos necesitan la victoria para seguir acercándose a sus respectivos objetivos.


El conjunto que dirige Unai Emery están obligados a ganar en Mestalla para seguir en el grupo de cabeza de la clasificación. Con 29 puntos y a 10 del líder, el Valencia buscará tres puntos que permita seguir apretando la zona Champions de la tabla. Por su parte, el Espanyol también está necesitado de puntos y una derrota le supondría meterse en problemas y comenzar a coquetear con puestos de descenso. Los periquitos tienen 16 puntos y están a 4 de los puestos calientes de la clasificación.

Una de las dificultades que intentará superar definitivamente el Valencia es su juego en Mestalla. El conjunto che no está dando su mejor imagen en su feudo y con el nuevo año los de Emery intentarán dar más espectáculo a su afición. El partido ante el Espanyol es una buena oportunidad para cumplir ese objetivo. Los valencianistas sólo han ganado dos partidos en casa de los siete que se han disputado. En el otro bando, los de Pochettino intentarán seguir en la buena línea ofrecida en las últimas jornadas del año.

'Chori' Domínguez no podrá debutar
Unai Emery contará con alguna baja destacada. Pablo Hernández, sigue lesionado por una rotura fibrilar y su puesto lo ocupará Joaquín, que está demostrando un gran nivel. Silva, Mathieu y Vicente tampoco estarán ante el Espanyol. Pese a que estos tres jugadores se han entrenado con el equipo durante esta semana, aún no tienen el nivel tras sus respectivas lesiones. Otro que tampoco estará sobre el césped de Mestalla será 'Chori' Domínguez, que aún no tiene la documentación necesaria para poder debutar con su nuevo equipo.

En cuanto al Espanyol, Pochettino seguirá utilizando el mismo once titular que tan buenos resultados le ha dado en las últimas jornadas. Forlín podrá jugar ante el Valencia y, ante las bajas de Iván Alonso, por sanción, y de los lesionados Iván De la Peña, Tamudo, David García y Marqués, el entrenador espanyolista llamó a los jugadores del filial Marc Pedraza y Javi López.

A BALON PARADO

Unai Emery ensayó jugadas de estrategia y a balón parado en el último entrenamiento del año 2009, que sirvió de preparación de cara al primer encuentro de Liga del próximo año que se disputará este sábado frente al Espanyol en Mestalla.

David Silva y Jeremy Mathieu se ejercitaron con normalidad. Tanto el canario como el francés parecen haber dejado atrás sus respectivas lesiones, aunque habrá que esperar hasta el último momento para ver si finalmente Unai Emery los incluye en la lista de convocados.

Por su parte, Vicente Rodríguez completó su quinto entrenamiento consecutivo después de que el martes pasado el equipo tuviera una sesión doble donde trabajaron más extensamente el apartado físico tras haber disfrutado de una semana de vacaciones por el parón de la Liga en Navidad.

Pablo Hernández fue el único jugador de la primera plantilla que siguió sin ejercitarse, ya que esta semana se le indicó que debía continuar quince días más de baja para recuperarse de la rotura fibrilar que sufrió en el último partido de la Europa League disputado contra el Genoa italiano.

PABLO ES OPTIMISTA

Pablo Hernández presentó su sitio web personal www.pablohernandez19.com, donde le gustaría "ver una foto levantando un trofeo con el Valencia" al final de esta temporada. Pablo se recupera de una microrrotura muscular. "Ayer hice unas pruebas y salió que había rotura, ahora intentaré recuperarme lo antes posible", dijo esperanzado. De todas formas, el de Onda matizó que "hay que tener cuidado con las lesiones musculares y hay que procurar no forzar". "Soy optimista y tengo buenas sensaciones", agregó.

El jugador reconoció que ganar una copa sería "algo muy importante y muy bonito" para el club. El castellonense recordó que el Valencia "está vivo" en las tres competiciones. "Creo que se ha hecho una muy buena primera parte de la temporada y se puede hacer algo bonito y grande", destacó.

"Creo que se ha hecho una muy buena primera parte de la temporada y se puede hacer algo bonito y grande"
Pablo manifestó que en la fase de la Europa League que se abre a partir de febrero hay "equipos muy grandes como el Liverpool y la Juventus y es un trofeo muy apetecible". Sobre la Copa del Rey explicó que "los cruces no son del todo favorables, pero el equipo está capacitado para ganarla".

Otra de las fotos que a Pablo le gustaría ver en su web es la de la selección española en el Mundial. "Me gustaría jugar el Mundial porque es una ilusión muy grande, pero es algo que está muy lejos todavía", indicó el jugador que considera que "primero hay que dar un gran nivel en el Valencia".

SILVA Y MATHIEU VUELVEN A ENTRENAR

David Silva y Jérémy Mathieu se ejercitaron con el resto de sus compañeros al reincorporarse a los entrenamientos del Valencia tras avanzar en la recuperación de sus respectivas lesiones, aunque no completaron toda la sesión que realizó el conjunto valencianista.

Silva, con un esguince de ligamentos en su rodilla derecha, y Mathieu, con problemas musculares, se entrenaron ayer lunes en solitario después de que se perdieran los últimos partidos del Valencia, mientras que hoy lo hicieron con el resto de jugadores en la primera parte del entrenamiento dirigido por el técnico Unai Emery.

Por su parte, el argentino Éver Banega se reincorporó a las sesiones preparatorias del Valencia a pesar de que el resto del equipo acabó ayer sus vacaciones navideñas, ya que el centrocampista tenía permiso para volver un día más tarde por el partido que disputó con Argentina frente a Cataluña hace unos días.

El único jugador del primer equipo ausente en la sesión fue el extremo derecho Pablo Hernández, quien continúa con su recuperación de la rotura fibrilar que sufrió en el partido de Liga Europa frente al Génova italiano.

ALCANZAN EL ACUERDO

El Valencia CF ha alcanzado un acuerdo para la reanudación de las obras del nuevo estadio de Mestalla, que permanecen paradas desde hace diez meses, con la intención de que una vez reiniciadas, "no se detengan hasta que el primer equipo pueda competir" en la nueva instalación.

La intención inicial es que las obras se reanuden a lo largo del mes de enero de 2010 y que si no es posible hacerlo en el primer mes del año, puedan dar comienzo en febrero.

Respecto al momento en el que el estadio estará en condiciones de ser utilizado, desde el club se indicó que, como muy pronto, podría empezar a usarse en la temporada 2011-2012, aunque no se confirmó esta fecha como definitiva.

El club destacó la importancia del acuerdo e indicó que la reanudación de las obras tendrá lugar cuando "se consigan las autorizaciones administrativas pertinentes y la financiación necesaria", aunque no confirmó los detalles económicos del proyecto.

MIGUEL DETENIDO

Miguel, defensa del club Valencia, fue detenido en la madrugada de hoy sábado por la Policía de Seguridad Pública (PSP), durante un incidente que se produjo en una discoteca en las afueras de Lisboa.

Según una fuente de la PSP, el incidente se produjo cuando "cuatro o cinco individuos", entre ellos el futbolista Miguel, intentaron entrar en una discoteca a las cinco de la madrugada, cuando ya las puertas habían cerrado.
Los agentes de seguridad del local impidieron la entrada, se produjo un altercado y hubo algunos disparos, que alcanzaron un automóvil estacionado en las inmediaciones.

Ya está en libertad
Dos horas después, el mismo grupo regresó a la discoteca, pero ya los esperaban agentes de la PSP y fueron llevados hasta la estación de la policía. Miguel y otros integrantes del grupo fueron liberados horas después y sólo quedó detenido uno de ellos, a quien le fue ocupada un arma de fuego, agregó la fuente policiaca.